Con el fin de lograr un bonsai enraizado sobre roca – ishizuki– y conseguir un efecto más agreste y abrupto para nuestro bonsai, el primer paso será la elección de la roca a utilizar.
Puede ser porosa y presentar orificios y recovecos numerosos por donde las raíces futuras de la planta puedan progresar y anclarse de manera natural.
Debe ser estéticamente equilibrada y estable sobre una superficie lisa sobre la que asiente bien. Coníferas y algunos tipos de caducos son las especies más recomendables para ésta técnica concreta.
Asimismo facilitará el trabajo que estamos realizando que la planta escogida tenga raíces largas. Para ello la habremos cultivado en un tiesto alto en años anteriores.
Cómo hacer un bonsai sobre roca
Comenzamos fijando la roca a la maceta, para evitar que se desplace. Extraemos el bonsai de su tiesto y lo colocamos sobre dicha roca de la forma más creativa y natural posible anclándolo a ésta mediante sujeciones de las raíces a la roca (alambre, hilo de cuerda o rafia nos pueden servir).
Si las raíces son muy gruesas y para evitar rozadoras con las aristas afiladas de la piedra podemos podemos colocar un pequeño acolchado de musgo esfagno entre ambas para un mejor asiento de las mismas.
A continuación terminamos de rellenar con sustrato para bonsai el resto de la maceta cubriendo las raíces. En fases posteriores del proceso una vez que el árbol bonsái se haya afianzado, las iremos descubriendo a la par que la roca sobre la que se sustentan.
Con el paso del tiempo, las raíces se fusionarán y mimetizarán con las formas y ángulos de la roca creando un conjunto armonio y natural.
En éste primer vídeo demostrativo, David Cortizas nos muestra el inicio de un proyecto de plantación en roca de un ficus (muy apto para ésta técnica por su carácter invasivo y colonizador) sobre una maceta plana a la que deben llegar las raíces que se deslizan alrededor de la roca.
Para que no queden expuestas y se deshidraten éstas permanecerán temporalmente enterradas en sustrato dentro de una especie de bolsa o contenedor provisional confeccionado con tela de rejilla, para que las raíces estén oxigenadas al máximo y evitar exceso de humedad en ésta zona que favorecería un desarrollo de raíces donde no las deseamos tener sino en el fondo de la maceta, donde está la mayor humedad y el abono antes citado.
Depositando cierta cantidades de abono orgánico de liberación lenta en el perímetro de la maceta conseguimos favorecer el crecimiento de las raíces hacia ésta posición y un mejor anclaje de las mismas.
Cuatro meses después de la plantación el bonsai ha desarrollado raíces nuevas y la rejilla utilizada se puede retirar parcial o totalmente (dependiendo de la evolución de cada caso), para desenterrar la parte superior.
La colocación de una capa adicional de musgo ayudará a mantener la humedad de las raíces desenterradas. La evolución de éste proyecto la podéis seguir en el canal de David Cortizas.
Métodos alternativos de plantación en roca
Otra opción para conseguir el mismo efecto a la desarrollada anteriormente sería enterrar roca y árbol en una maceta profunda e ir descubriendo la roca poco a poco en sucesivos trasplante, reduciendo el tamaño de las macetas, hasta que alcanzara la posición deseada.
Otro método disponible y que produce resultados espectaculares es la utilización de keto para cubrir raíces, sugiriendo el efecto de que el árbol emerge de la propia roca. El keto es un sustrato con alta capacidad de retención de humedad y que se compone básicamente de arcilla tipo akadama de grano fino o en polvo, turba negra y opcionalmente algún agrutinante a base de alga o musgo- [Muy utilizado en la confección de kokedamas].
La aplicación del método descrito la describe el siguiente vídeo de Bonsai Iligan, que en éste proyecto utiliza un bonsai tamarindo para el mismo. Tras la fijación de las raíces entre las oquedades naturales de la piedra seleccionada se sujetan éstas con cuerda o rafia y se cubren con keto.
Para compensar la reducción de raíces podaremos convenientemente la parte aérea del árbol. Para lograr la supervivencia del árbol no debemos olvidar mantener las condiciones óptimas de humedad de éste sustrato de cultivo.