vinagre como herbicida ecológico

Insecticidas ecológicos para tratar las plagas de nuestros bonsáis

Resulta desalentador acercarnos un día a nuestros bonsáis y comprobar que una plaga de insectos se ha instalado de la noche a la mañana en nuestros apreciados árboles; una infestación de pulgón o unas pequeñas pelusillas blanquecinas en el envés de las hojas (cochinilla) de repente los invaden.

Combate las plagas del bonsái de forma ecológica

Quizás por descuido, por no aplicar tratamientos preventivos en su momento o simplemente porque es la época de mayor proliferación de estas plagas el caso es que tenemos que tratar a nuestros árboles para que el problema no vaya a mayores.

Además de los conocidos productos fitosanitarios químicos de siempre también tenemos la opción de tratar a nuestras plantas con productos ecológicos, mucho más respetuosos con el medio ambiente, con las plantas y los animales de nuestro entorno.

Son remedios ecológicos que funcionan, que llevan mucho tiempo en el mercado siendo utilizados por agricultores profesionales y aficionados y que han sido ampliamente utilizados y estudiada su efectividad para el tratamiento de las enfermedades y plagas que afectan a árboles y cultivos.

No son remedios caseros, sino productos de eficacia altamente contrastada utilizados universalmente para combatir las plagas más habituales del huerto y la agricultura y por extensión igualmente aplicables a nuestros árboles.

¿Por qué tratamientos ecológicos? Mira por qué todo son ventajas:

  • No contaminan ni acaban en el medio ambiente, el suelo o las aguas subterráneas.
  • Por su propio origen natural no resultan tóxicos ni para animales ni personas.
  • Por su efecto físico o mecánico no generan resistencias biológicas en las plagas para las que se usan.
  • En cultivos agrícolas y consumo humano no precisan de período de seguridad entre la utilización del producto y la cosecha del cultivo.

Se mire por donde se mire los remedios ecológicos son mucho más seguros tanto para el que los aplica como para el resto de vida en el jardín o huerto donde los apliquemos; los miembros de nuestra familia, mascotas y nuestro entorno natural en general se librarán de productos irritantes, tóxicos o potencialmente peligrosos para la salud como lo son los productos fitosanitarios sintéticos.

Comenzemos enumerando los más habituales en jardinería ecológica:

Jabón potásico

Es de origen vegetal y se obtiene a partir de ácidos grasos (lípidos) en combinación con el hidróxido de potasio (los tradicionales jabones a base de sodio utilizados como detergentes).

Es un producto de fuerte acción insecticida y acaricida que actúa por contacto mecánico alterando el caparazón protector o exoesqueleto de los insectos parásitos y causando así su muerte. No actúan por tanto por vía de ingestión como un insecticida químicos estándar.insecticidas ecológicos: jabón potásico

Su uso está indicado para combatir a pulgones, mosca blanca, arácnidos, trips y cochinillas entre otras plagas.

Respetuoso con el medio ambiente; 100% biológico y biodegradable.

Uso permitido en interior de invernaderos.

No resulta tóxico ni para plantas ni animales.

Autorizado su uso en agricultura ecológica por su nula toxicidad.

Se puede usar sin restricciones tanto de forma curativa como preventiva.

Se puede combinar también con otros fitosanitarios ecológicos o ser usado como mojante de éstos.

Usos del jabón potásico

Resumimos a continuación las principales aplicaciones de éste insecticida biológico de acción múltiple:

  • Acción preventiva y/o curativa
  • Efecto mojante que contribuye a que otros productos (como aceite de neem) permanezcan por más tiempo actuando sobre la planta y por tanto alargando su efecto.
  • También tiene acción limpiadora sobre las hojas de los restos de melaza producidos por parásitos, reduciendo así la generación posterior de plagas de hongos. Al limpiar la superficie foliar de dichas suciedades se destruye el biotopo sobre el que se puedan desarrollar nuevos microorganismos patógenos y se incrementa el efecto de otros insecticidas.
  • Aporta nutrientes adicionales a las plantas a las que se aplica.

El tratamiento lo realizaremos a primera hora de la mañana o a última de la tarde en días sin lluvia o viento. Se debe usar con un pulverizador, cada 10-15 días, por toda la superficie de la planta, tanto el haz como el envés de todas las hojas.

Bien aplicado éste plagicida es suficientemente eficiente para mantener sana tu colección de bonsáis además de ser inocuo para ti o el medio ambiente, cosa no menos importante ¿no crees?

Composición:

Oleato vegetal potásico 50 %, PH 9.6; hidróxido potásico (K2H), aceite vegetal y agua.

Dosificación:

Como referencia podemos guiarnos por las siguientes indicaciones aunque como casi siempre es recomendable leer y seguir las pautas del fabricante:

– Como Insecticida: de 1 a 3 ml por litro de agua.
– Como Mojante: 1 ml por litro de agua.
– Como Limpiador: 10 ml por litro de agua.

Aceite de Neem

Éste otro insecticida ecológico que se puede utilizar sin problemas en tus bonsái o plantas del huerto y que tiene su origen en las semilla y hojas del lila india ( Azadirachta Indica) o nimbo de la India, árbol propio de regiones tropicales o subtropicales.

insecticidas ecológicos, aceite de neem

Éste producto es 100% natural, no contamina el medio ambiente ni es dañino para el ser humano o las mascotas del hogar. Está constituido por numerosos principios activos biológicos, muchos de ellos con propiedades insecticidas naturales.

El aceite de Neem actúa por ingestión del mismo a través de las hojas y partes verdes de la planta que son comidas por los parásitos. Es un inhibidor del metabolismo y crecimiento de tales parásitos.

Al actuar por ingestión no afecta a otros insectos beneficiosos en el huerto o jardín, como las abejas o las mariquitas, pues estas no comen plantas.

También es de acción fungicida y por tanto útil para luchar contra hongos y bacterias.

Lo aplicaremos diluido junto al agua de riego para que sea absorbido por la planta y efectivo en toda ella.

Tierra de diatomeas

Aplicada como insecticida natural biológico e incluso fertilizante ésta tierra blanca de composición silícea está formada en esencia por algas unicelulares fosilizadas.

Se utiliza para luchar activamente contra la plagas del huerto o jardín de forma efectiva y segura, pues es inocua tanto para personas como animales.

En el siguiente vídeo teneis de forma más extensa explicadas todas la utilidades y aplicaciones de la tierra de diatomeas en el huerto, jardín o árboles bonsáis.

Aceite de parafina

Usado frecuentemente como alternativa ecológica al tratamiento con aceite de invierno en cultivos y árboles con posibles brotes de ácaros en fase de hibernación. Se aplica sobre caducos aún sin hojas y antes de que los nuevos brotes aparezcan, a finales de invierno.

Su eficacia estriba en que se deposita a modo de capa impermeable sobre los insectos que les impide respirar. Se aplicará a razón de 5-7 cc por 10L de agua con un atomizador preferentemente.

Bacillus thuringiensis

Bacteria natural que produce de determinadas toxinas que al ser ingeridas por las plagas en su forma larvaria les causa daños intestinales mortales, a la vez que resultan inofensivas para otros insectos y vertebrados. Hay distintas variedades de bacillus que atacan a especies concretas de plagas.

Se debe aplicar preferentemente con nebulización y repetir el tratamiento varias veces con intervados de 8-10 días entre cada uno.


 


Por último, repasemos las plagas más habituales que te pueden encontrar atacando a tus bonsáis y te propondremos los productos naturales más adecuados para erradicarlas.

Ácaros: aceite de parafina, jabón potásico, purín de ortigas.

Antracnosis (o chancro, enfermedad causada por hongos del género Colletotrichum o Gloeosporium, habitual en zonas con alto grado de humedad y calor): bicarbonato sódico.

Botritis (podredumbre producida por hongos): jabón potásico.

Mildiu: caldo bordolés (combinación de sulfato cúprico y cal hidratada), jabón potásico.

Mosca blanca: aceite de parafina, ajenjo (artemisia absinthium).

Negrilla: jabón potásico

Oídio: jabón potásico, azufre.

Orugas: Bacillus Truringiensis

Pulgón: aceite de parafina, jabón potásico.

Cochinilla: alcohol etílico o metílico (el de quemar)


Hay más alternativas y productos aparte de los mencionados procedentes de la agricultura ecológica que podemos utilizar en los tratamientos que aplicamos a nuestros bonsáis.

También podríamos citar las infusiones de ajo, la cola de caballo (Equisetum arvense), el purín de ortigas o la nicotica como otros conocidos ejemplos de remedios caseros y ecológicos para combatir las plagas de nuestras plantas.

Vale la pena meditarlo y ser más respetuosos con el medio ambiente, ayudando con pequeños gestos como éste de no utilizar productos químicos para tratar a nuestros árboles.

Una reflexión final

¿Qué nos aporta la agricultura ecológica al mundo del bonsái?

Quizás parezcan a priori actividades o campos completamente direrentes, pero razonamiento más meditado nos hace ver los muchos puntos de conexión y también beneficios que la Agricultura Ecológica puede aportar al cultivo más racional y respetuoso con el Medio Ambiente por parte de los aficionados al bonsái.

Veamos por qué.

  • Parece obvio que alguien sensible a la belleza de un pequeño árbol cultivado en maceta tiene que concetar también con la Naturaleza, con su máximo respeto y compromiso de conservación.
  • Los usos y prácticas aprendidos desde hace tiempo y adquiridos de nuestros antecesores hay que revisarlos para actualizarlos a los nuevos usos, nuevos productos  y nuevas alternativas que ofrece la tecnologia de hoy y que mejoran los resultados del cultivo tradicional; abonos más eficientes, productos fitosanitarios y accesorios ergonómicos y más eficaces.

Repasemos algunos ejemplos de estas mejoras/avances:

  • Productos químicos y fitosanitarios que aplicamos a nuestros árboles, pero que acaban dejando residuos químicos en el Medio Ambiente; fungicidas, insecticidas, etc.. y que pueden ser sustituidos por otros no químicos sin efectos secundarios para el Medio Ambiente.
  • El riesgo más que evidente de toxicidad para otros seres vivos; fauna local, ambifios e incluso nuestras propias mascotas, perros y gatos,  o incluso nosotros mismos o nuestra familias. Productos como el glifosato, principal componente en el 90% de los herbicidas que consumimos en la actualidad en nuestro jardín o huerto, están siendo cuestionado por las autoridades por su relación con graves enfermedades como el cáncer en seres humanos.

Seamos consecuentes con nuestro comportamiento.

Si nos admira la Naturaleza, nos deleitamos cultivando y reproduciendo fieles copias de sus maravillosos árboles, ¿Qué sentido tiene que le demos de lado y no la ayudemos en la medida de nuestras posibilidades, a que no siga siendo agredida más, como lo está siendo por el comportamiento de la Humanidad?

 

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