El bonsái de olmo es un espectacular caducifolio  que maravilla a cuantos se inician en el mundo del bonsái, por su belleza, su resistencia y su versatilidad.
Éste es uno de los árboles bonsái más populares, especialmente entre los principiantes; su crecimiento rápido,  constante y tolerante les permite a los que empiezan en el cultivo tiempo para acostumbrarse a su cuidado.
Es por ello una de las especies más amables y más tolerantes con todo tipo de errores, tales como exceso de riego, falta del mismo o cambios bruscos de temperatura.
Puede alcanzar los 20 metros y actuar como semiperenne en climas mediterráneos benignos y como bonsái se crean bonitos ejemplares con llamativo entramado de ramificación fina de pequeñas hojas ovaladas.
CaracterÃsticas del olmo
Tiene una corteza distintiva que va del color gris oscuro al marrón rojizo que se vuelve fisurada en modo de escamas y leñosa cuando son maduros. Sus hojas son dentadas de forma ovalada, pequeñas y de un verde intenso, asà como una nervadura muy marcada.
Su patrón de crecimiento es altamente predecible, por lo que  son muy indicados para los que se inician en el cultivo del bonsái.
Clasificados dentro del Orden Rosales, la Familia Ulmáceas comprende actualmente a 7  géneros, algunos muy conocidos por los bonsaÃstas como son el género Celtis, Zelkova, Aphanante o Ulmus, que en su totalidad agrupan entre 35 y 50 especies entre arbustos y árboles.
Destacamos a dos de ellos:
- Género Ulmus: originario del Hemisferio Norte; reúne las especies ulmus pumila, ulmus minor y ulmus parvifolia.
- Género Zelkova: distribuido por el sur de Europa y Asia; algunas de las especies más conocidas son zelkova serrata y  zelkova nire.Â
Cuidados del bonsái olmo
Recordamos a continuación los puntos básicos que tendremos en cuanta a la hora de cuidar de nuestro olmo, de la mano de MartÃn de Tribubonsai  en el siguiente vÃdeo:
Ubicación
Recordar que es un árbol de exterior y por tanto debe estar a la intemperie todo el año.
Al igual que la mayorÃa de los bonsáis, los olmos precisan de mucha luz. La luz directa de la mañana es ideal por su baja intensidad. No le gustan las corrientes de aire o sitios con mucha variación de temperatura a lo largo del dÃa. Pueden estar en el exterior durante el verano y en invierno puede soportar heladas si está aclimatado a ellas y no son muy intensas.
Cultivando a pleno sol el tamaño de las hojas será menor y las nuevas brotaciones más vigorosas. En climas muy calurosos protegeremos del calor intenso de mediodÃa colocándolo a semisombra.
Podremos cultivarlo como bonsái de interior pero en lugares muy bien iluminados, para mantener controlado el tamaño de los nuevos crecimientos. Los ambientes cerrados y excesivamente secos pueden provocar que hojas interiores amarilleen y caigan por falta de luz.
Riego
Cuando la superficie del sustrato se seque ligeramente será el momento de volver a regar. No dejaremos que dicho sustrato seque completamente durante mucho tiempo.
En invierno los requerimientos de agua serán menores que durante primavera/verano en los cuales habrá que regar prácticamente a diario según la dureza del clima. Observando el follaje del olmo también podremos averiguar sus necesidades hÃdricas.
La pulverización esporádica siempre es beneficiosa para la salud del el árbol, pero ésta en ningún caso sustituirá a un riego regular ni ser demasiado regular para evitar problemas de hongos o plagas.
Poda, pinzado y defoliado
La poda y el pinzado son imprescindibles para mantener la forma correcta de nuestro árbol, asà como para fomentar la nueva ramificación. Cuando los nuevos brotes hayan desarrollado al menos 8-10 pares de hojas, cortaremos a 2-3 hojas (según la dirección que deseemos para la nueva rama, pues sus hojas simples crecen de forma alterna).
Con ésta acción conseguimos que la savia que fluye hacia el extremo de la rama retroceda y comience a activar las yemas traseras presentes en las axilas de las hojas que hemos dejado, obteniendo una segunda brotación brotación mas espesa y cercana al tronco.
Asà conseguiremos que no pierda la forma con el pinzado de mantenimiento. En el siguiente vÃdeo, Carlos Lázaro nos detalla el pinzado de formación de un espectacular ejemplar de olmo chino.
Los estilos más habituales en los que encontramos al bonsái olmo son  el vertical informal, en escoba y formaciones en bosque.
El bonsái de olmo chino  es proclive a emitir chupones desde las raÃces; los eliminaremos inmediatamente.
El defoliado puede ser total y lo realizaremos a finales primavera o mejor aún,  inicio del verano. Con tijera o a mano tirando en el sentido de crecimiento de la hoja. Es importante pinzar también las puntas de las ramas para evitar que éstas broten únicamente por su extremo y no por las yemas latentes posteriores.
Se aconseja no hacerlo todo los años y preferentemente  en árboles en formación que queremos densificar su ramificación, ya que en apenas dos semanas habrá emitidos las nuevas hojas, si lo colocamos a pleno sol para que acelerar su crecimiento.
Alambrado
Procuraremos alambrar nuestros olmos cuando la nueva ramificación ya se haya vuelto semileñosa (finales primavera-verano), pues de hacerlo antes los brotes son demasiado tiernos y quebrarán fácilmente.
De todas formas ésta especie no requiere de excesivos alambrados pues mediante el pinzado podemos dirigir y mantener la forma de las ramas, sobretodo en árboles en formación. Alambrados estructurales es mejor realizarlos  en invierno.
Tras el alambrado, estaremos atentos al crecimiento del árbol, pues la corteza del olmo es fina y se puede marcar con el alambre fácilmente. Utilizar alambre de aluminio, por su menor dureza para no dañar la corteza.
Abonado
Abonaremos nuestro bonsái olmo una vez cada dos semanas durante la temporada de crecimiento (primavera y otoño en el Hemisferio Norte), como ya sabemos, con un abono orgánico de calidad. No olvides regar  bien tu árbol antes de abonarlo.
No abonaremos árboles recién trasplantados ni inmediatamente cuando comienzan con la primera brotación; esperaremos unas semanas para hacerlo.
Para contribuir a la reducción del tamaño de la hoja, además del cultivo a pleno sol, podemos utilizar abonos ricos en potasio (K) y fósforo (P) y que lleven mayor porcentaje de tales elementos que de nitrógeno (N), para limitar el desarrollo de las hojas.
Trasplante y sustrato
Cada dos años aproximadamente, para árboles en formación al inicio de la primavera, cuando los brotes comienzan a hincharse. En ocasiones éstos árboles no reaccionan bien a la poda drásticas de raÃces, asà que procuraremos eliminar raÃces grandes en trasplantes sucesivos. Tiene gran capacidad de regenerar raÃces finas.
Un sustrato apropiado serÃa akadama, mantillo y arena volcánica a partes iguales. Admite otras combinaciones pues es poco exigente en cuento a la mezcla, aunque en cualquier caso debe ser drenante y preferiblemente ligeramente ácido que calcáreo.
Mantendremos el árbol en un lugar resguardado de corrientes y sol directo varias semanas después de trasplantarlo.
A la hora de elegir una maceta apropiada, ésta será esmaltada, de forma variable en función del diseño del árbol, siendo los colores más habituales el azul y el crema.
Enfermedades y plagas
Mantener el árbol limpio y saludable será una buena forma de protegerlo contra las plagas. Procurar limpiar el polvo, si lo hubiera, que pudiera depositarse sobre las hojas para favorecer la correcta insolación de la planta.
Las plagas más habituales que pueden atacar nuestro olmo son: la cochinilla, araña roja, la mosca blanca y pulgones. Éstas las podemos tratar de forma ecológica con el siguiente procedimiento:
Si se observa una caÃda anormal de la hoja fuera de temporada, pegajosidad en el follaje o insectos visibles a simple vista, trataremos el árbol rociándolo con una solución de 1L de agua y 1 cucharadita de lavaplatos doméstico. Repetiremos varias veces en sucesivos dÃas hasta que veamos los resultados.
Otras enfermedades y carencias que pueden atacar o mermar la salud de nuestro olmo:
- La clorosis férrica, (hojas amarillentas) ocasionada por la carencia de hierro y manganeso puede ser habitual y la combatiremos con una solución de quelato de hierro.
- Grafiosis del olmo: importante enfermedad micótica que obstruye los vasos conductores de la savia del árbol secando partes de él. La transmite un insecto barrenador, un pequeño escarabajo que perfora galerÃas bajo la corteza. Ulmus parvifolia y ulmus pumila son de las variedades más resistentes a ésta enfermedad.
- Agallas: abultamientos que salen en las hojas de forma redondeada causadas por un insecto de la familia del pulgón que anida en el interior. Las agallas se vuelven rojizas con el tiempo y terminan por marchitar la hoja. Evitaremos su proliferación eliminando dichas hojas y tratando con un insecticida sistémico.
Reproducción / Propagación
La forma más rápida de obtener nuevos ejemplares es mediante esquejes de entre 10-20 centÃmetros que cortaremos en verano, y pondremos en agua a la espera de que emita nuevas raÃces.
Una vez que éstas sean suficientes, pasaremos a un tiesto con sustrato ligero: turba, arena y mantillo.
También tenemos la opción de reproducirlos mediante semillas para los más pacientes. También admite el injerto por aproximación.
Y mediante acodo aéreo, que realizaremos  al inicio de verano, podremos obtener ejemplares potentes en un mÃnimo de tiempo.
¿Pensando en hacerte con tu primer olmo chino? Te sugerimos éste ejemplar de 5 años.
Variedades de olmo más comunes en bonsái
A la hora de distinguir las variedades de olmo que más frecuentemente se trabajan como bonsái conviene fijarse sobretodo en la forma de la hoja y el aspecto del tronco para poder diferenciarlos. Aquà referenciamos algunas de las más habituales:
Ulmus parvifolia
Es la variedad descrita con detalle en la presente ficha; en ejemplares adultos presente unas bonitas escamas de colores marrones o rojizos en la corteza. Otras subvariedades utilizadas por los aficionados al bonsái:
ulmus parvifolia corticosa. Corteza quebrada y rugosa similar a la del género quercus.
ulmus parvifolia hokkaido
Ulmus pumila
Olmo autóctono europeo que además de ser poco vulnerable a la grafiosis, su porte menor de hasta tan solo 5 metros y hojas mas pequeñas, lo hacen además muy apetecible para su cultivo como bonsái.
Ulmus minor
Olmo común o negrillo, propio de climas templados. Caduco que pueden alcanzar gran altura y porte rastrero. Hojas simples alternas y aserradas, de contorno lanceolado, con la base asimétrica y peciolo evidente. Prefiere los suelos calcáreos.

Zelkova serrata
Originaria de Japón, ésta ulmácea es sumamente utilizada para bonsái. Este caducifolio de hojas dentadas (de ahà su nombre latino), que adquieren unos bonitos tonos anaranjados en otoño, siendo su corteza lisa y de color grisáceo. Otros nombres por los que se la conoce son zelkova japonesa, olmo de agua u olmo de Siberia.
De tronco liso, que se hace progresivamente escamoso con la edad y color grisáceo. La forma habitual es de un tronco fuerte con una copa densa, con numerosa ramificación secundaria y terciaria.
Su resistencia a las heladas es menor que otras variedades descritas, por lo que deberá ser protegida del frÃo extremo en climas con inviernos muy rigurosos. Supera todos los tipos de poda, creciendo con profusión tras la misma, al igual que ante el defoliado, siempre y cuando el árbol esté sano y fuerte.
La forma más habitual en que encontramos éste bonsai olmo japonés es en estilo escoba u Hokidachi, por su abundante y fina ramificación.
Es uno de los árboles que más se exponen sin hojas por la delicadeza de su ramificación y lo bien que la lucen.
Zelkova nire

El bonsai zelkova nire keyaki (según algunas denominaciones también se la conoce como Ulmus Kirekeyaki) es una subespecie de la zelkova japonesa.
Su corteza lisa se transforma en escamas al llegar a la madurez. Sus hojas son ovales y acaban en un ápice agudo, con un profundo marcado dentado y provistas de un pecÃolo corto, de color verde oscuro en la cara superior, más claras en la inferior.
Menos tolerante al frÃo que su pariente el ulmus parvifolia. Coloración otoñal en tonos amarillos anaranjados, perdiendo toda la hoja con los primeros frÃos.
Para concluir podemos decir sin temor a equivocarnos que la inmensa mayorÃa de los aficionados al bonsái en sus comienzos tuvieron algún olmo  entre sus primeros árboles. Como mencionábamos al inicio, su dureza y versatilidad hacen del olmo una de las especies de bonsái más recomendadas y agradecidas para los principiantes.
Buenas tardes, lo primero felicitaros ,por la información, mi Olmo, tenÃa una especie de nidos en las hojas por debajo, hace unos dÃas vi una tela de araña y la araña, la cual mate, me guie por vuestra información, mezcle agua con un poco de lavaplatos, los pulverice durante dos dÃas, al tercero empezaron a caer todas las hojas, se ha quedado sin hojas, y le he hecho una poda casi total, no se si he hecho bien,pero no lo podÃa ver sufrir, si puedo os mandó fotos. Soy mayor y novata en Internet, y en lo que se refiere a bonsais, me gustarÃa qué me ayudaseis, lo tenia precioso,y ahora me da pena.
GRACIAS Un saludo esperando vuestra respuesta.